¡Viva España!

Guardia que guarda

De nada vale defender una nación si sus guardianes se quedan dormidos. De nada vale España si los españoles no la guardan como vigilantes despiertos. Hay que permanecer en vela por nuestra patria pues numerosos son los enemigos que la acechan y la rodean. Nunca como ahora ha sido más urgente guardar la nación que es el amor de todos nuestros amores. 

Este triste momento de nuestra historia no tiene ejemplos pasados semejantes. Se nos gobierna con tal avidez que el interés general del pueblo español es el gran olvidado mientras se favorece a empresas particulares. El pillaje se consuma mediante leyes promulgadas por los legisladores y el Congreso de los Diputados es lo más parecido a un centro productor de golpistas y secesionistas. Los partidos políticos han envenenado la mentalidad nacional y el viril carácter del pueblo español apenas tiene arrestos para plantar cara indeciso y miedoso. No importa que estemos en una época ilegal de ilegalidades sistémicas. La nación española ya no encuentra su postura como pueblo. Ni siquiera cuando un irracional se suena los mocos con nuestra bandera.  Y esta situación excepcional impide que se fiscalice los actos gubernamentales. Solo los políticos gozan de derechos jaleados por una prensa cómplice que publica lo que le permite la clase política o los banqueros mientras la verdad está censurada y se amordaza a los pocos que se atreven a ponerle voz. El debilitamiento de la opinión pública clama estentóreamente como si no hubiera conciencias. Pocos quieren ser leales a España porque resulta odioso ante los independentistas y sus afines en los escaños del Congreso. 

Nuestros leales representantes

Me pregunto, si ya es hora de que acabe esta situación indigna y a todas luces equívoca. ¡Por supuesto que la hora ha llegado!..Es imperioso estar despiertos y ejercer el papel de guardianes para avisar de los peligros que súbitamente caerán sobre la patria de todos los españoles. ¿Qué pasará si nos quedamos dormidos o mirando para otro lado? España será tomada. Y ninguno de nosotros será digno de llamarse español. Podremos llamarnos cualquier cosa menos españoles. ¿Porque de qué le sirve a una ciudad tener guardianes que se quedan dormidos? En vano guardan la nación. 

Todos sabemos cómo estamos y quiénes han provocado la desolación moral que hace imposible que tumbemos y retumbemos con una sola voz atronadora. Sabemos quiénes son los causantes de nuestras desdichas y estas no tendrán fin puesto que eso solo puede conseguirse echando abajo a los causantes de todos los males actuales con nuestros votos. No pueden gobernarnos los mismos desde sus instituciones corruptoras. O seremos empujados a más tristes estados que el triste estado presente.  España es un bonito negocio para ellos haciendo haraposos como máquinas que los expenden llenando nuestras vidas de miseria ultrajándonos en nuestra personalidad. Sin embargo todo esto es el principio de lo que nos tienen preparado aún lo van a hacer peor. Estamos como la mujer encinta en el inicio de nuestros dolores. 

Guardianes de España

 Yo grito: ¡Viva España!.. con todas sus consecuencias. Y deseo que todos los españoles que así lo sienten en su corazón lo griten también eternamente. Sé que existen millones de españoles engañados o son indiferentes por pereza mental o tal vez por error de creer en personajes independentistas predispuestos al puño de hierro y a la abyección absolutista. Tales individuos tienen sus panegiristas asalariados para que muchos españoles crean sus engaños y mentiras tratando al pueblo español de ignorantes. Los vemos en la televisión dándose ínfulas de superhombres reputados y providenciales con la misión de destruir España y salvar a Cataluña o las Vascongadas anexionando a sus territorios los pobres trozos que queden de nuestro hermoso país. Sin pensar en los torpes sacrificios por la causa independentista que nos ofrecen los fugados a Bruselas. Subvierten el orden social embarcando a los demás mientras ellos huyen a puertos seguros cuando la tormenta estalla. Se comportan como ratas en vez de capitanes. 

Lepra independentista

Sepan nuestros gobiernos que no les voy a dar el gusto de renegar de España y recibiré con agrado las injurias y provocaciones (no espero muchísimas felicitaciones) que por causa de ser español caigan sobre mí. Es inútil que los que tiranizan a mi país y lo repudian me hagan abdicar de mi soberana españolidad. Esta será mi prueba de español mantener mi gran amor por España.