Valencia levanta sus defensas

                                 

                         

Somos un gran pueblo. Independientes de Cataluña

VALENCIA LEVANTA SUS DEFENSAS

Amanece en el antiguo Reino. Una serena aurora despunta en el horizonte con su luz matutina. Llegó la hora. Valencia se levanta fraternalmente con Castellón y Alicante. Se plantan en pie las regiones para restituir el honor arrebatado, que durante décadas de infamia política y ultrajantes leyes nos han sometido a los designios de una salvaje y prehistórica Cataluña. Nuestras autoridades elegidas han sido cómplices de la devastación cultural, de la destructiva y sistemática campaña con que se denigran y pisotean nuestras genuinas señas de identidad, y de abrir de par en par las puertas de esta legendaria "Cornucopia de la Abundancia" a la horda pancatalanista, que va tomando posesión de nuestra historia y de todo el patrimonio material e inmaterial, el precioso legado que durante siglos y siglos ha sido el orgullo de todos los linajes valencianos y del que somos sus herederos.. Tales atropellos no podían quedar sin respuesta oportuna valenciana y española por tiempo indefinido.

Valencia levanta a sus Guardianes. 

Sí, hermanos y hermanas en los sufrimientos pasados y presentes, y en las glorias venideras que veloces se aproximan a Valencia, nuestra voz se alza potente y clara como el rugido de una tierra valiente que se escuchará en todos los rincones territoriales de nuestros lindes. Nuestro nombre es algo más que un valor topográfico, algo más que unas letras geopolíticas, algo más que una mercancía que sirve de moneda de cambio, a las grotescas figuras de siniestros planes que tratan de cambiar el mapa de España. Somos lo que somos y nuestra personalidad es inalienable e intocable. Somos mucho más que esos falsarios que dicen representarnos con la boca y con sus acciones nos apuñalan en un ensañamiento atroz con las acometidas de un clan de psicópatas. Ahora vamos a mostraros que somos un pueblo de una gran voluntad y una potentísima voz. Nuestro retraimiento no llega al punto de tener más miedo que vergüenza, la necesaria vergüenza, para denunciar en vuestra cara toda la abominable impudicia con la que somos tratados sin merecerlo. Son tantas las arbitrariedades, tantos vuestros pecados capitales contra nuestro pueblo, que habéis colmado el vaso. Vuestra incivilizada barbarie es insoportable. Haremos públicos vuestros delitos, os quitaremos las máscaras y expondremos ante el pueblo español vuestro verdadero rostro de iracundo aspecto. Seréis señalados por vuestra traición.

Gánsteres políticos. Prensa mercenaria. 

Y ahora, leer lo que tengo que deciros a vosotros, hombres-máquina, programas informáticos, autómatas nulos de voluntad, sonámbulos sin conciencia de nada, que peregrináis apátridas, sin honor, obedeciendo ciegamente las instrucciones de las monstruosas y tenebrosas mentes que os dirigen: Dejar libre a este pueblo. No sois dignos de él. Valencia os encuentra despreciables, como una canalla cobarde que se ampara en las leyes para cometer sus crímenes contra la población indefensa, para cometer el homicidio de todo un pueblo honorable ante la historia. Escondéos en el fondo más oscuro de vuestras madrigueras a celebrar vuestros inmundos aquelarres, vuestros conciliábulos secretos, lejos de la vista y de los ojos nuestros. Habéis colmado toda nuestra paciencia. Sois los responsables de la subnormalización lingüística de nuestra juventud y de su horrendo sufrimiento en las aulas,  y profanadores de todos nuestros símbolos amados. ¡Fuera de nuestra visión! Pensáis que es casi demasiado tarde para deteneros amparados en vuestro gobierno inconstitucional. Vosotros, renegados de la Constitución, violáis con vuestras felonías la Carta Magna, Ley Suprema, de todos los españoles. ¿Cuál es el artículo que le otorga derechos a Cataluña para anexionar a Valencia y Baleares, en su aberrante y desquiciado mapa dels paísos catalans? ¡No nos entregaréis! Dejar libre al pueblo valenciano y balear.

Y a ti, pueblo valenciano, amor de todos mis amores, te ruego que escuches esta voz. Delante tienes dos caminos, la muerte y la vida. Escoge la vida para que te vaya bien a ti y a tus hijos. Camina bajo la luz del nuevo día que amanece glorioso para los hijos de esta tierra y deja detrás las sombras de la noche que te ha cubierto con su manto oscuro hasta hoy. Canta la nueva canción, pon en tu boca los versos del Himno y broten de tus labios un poema de amor y de paz. Levanta tus defensas pacíficamente, lucha con las formidables armas de tu espíritu. La violencia engendra violencia. Y la espada muerte por la espada. No te alces con la espada ni la desenvaines para mancharla de sangre forjala en una reja de arar.  Las fuerzas oscuras os provocarán para que luchéis en su terreno para que os rebajéis de vuestra noble condición humana y ensuciéis vuestra justa causa. ¡No lo permitáis! Seréis más grandes poniendo la mejilla con dignidad, aguantando los insultos, siendo escarnecidos sin causa, y resistiendo a las provocaciones que serán muchas. Defiéndete con honor y dignidad y en tus momentos difíciles recuérdalo a ÉL. Siempre tendrás una salida. Obedece estas consignas. Recuerda que sois un pueblo de pescadores, agricultores, comerciantes, músicos, escultores, pintores, novelistas, escritores, poetas y artesanos. No sois hombres y mujeres de guerra ni soldados acostumbrados a las hazañas bélicas. Y os vais a enfrentar a unos brutos de las cavernas de animalidad arcaica. Porque eso son los pancatalanistas y sus jerarcas de Cataluña. Y no conocen otra ley que la de la fuerza. Y tienen respaldo internacional de potestades tenebrosas.

 

Amor y Paz para Valencia

Pon paz entre Valencia y Cataluña. Distingue bien a tus atacantes no todos los catalanes son pancatalanistas ni conquistadores de comunidades para delirantes proyectos. Todo buen catalán es catalanista como todo buen valenciano es valencianista. Amar la cuna de uno es un honor. Estar enamorado de sus tradiciones y lengua una dignidad para los catalanes y los valencianos. Distingue bien la diferencia entre unos jefes imperialistas y un gran pueblo catalán que no lo es. No manches el honor de Cataluña ni el de su pueblo, solo oponte a esa ideología dominante y dominadora que está encerrada en las perversas cabezas de unas cuántas barretinas que no representan a todo su pueblo, ni su sentir. Defiéndete con honor, y mantengan  limpio el honor del pueblo catalán. Gana esta pelea con respeto y no respondas airadamente con tus puños. No llenes las calles de manifestantes furiosos, ni dilapides tus energías en continuas manifestaciones y algaradas, ni disturbios públicos. No seas tan retrógrado ni copies las estrategias y las tácticas de tu enemigo. Lucha con las armas de tu gran espíritu.Y recibirás ayuda.  Vencerás.

Y, sobre todo, sobre todo, no esperéis la aparición de un líder que os congregue. El gran líder está en todos vosotros, en cada mujer, hombre y niño de esta tierra. Juntos como una montaña de roca compacta os pondréis en marcha y nada os detendrá. ¡Ni nadie!..Hoy hace un año que escribí esto y me siento conmovido por el curso de los acontecimientos. ¡El Antiguo Lo Regne de Valéncia al fin..¡al fin ha empezado a levantar sus defensas! Un gran sonido de sofar está despertando al pueblo valenciano. Todo empezó el 11N tras los acontecimientos del 9 de octubre. ¡Ya se prepara la unión de todo el Reino! En mayo se celebrará la Convención. Lo que salga de esa fecha hay que darle la mayoría absoluta en Les Corts Valencianes. No nos sirve una representación residual en las instituciones públicas valencianas si queremos sobrevivir como españoles y valencianos. 

¡Vixca Valéncia! ¡Vixca! ¡Vixca! ¡Vixca!

Y ahora concluyo. Para probar nuestra fortaleza es necesario hacer una prueba. Valencia necesita un millón de afiliaciones a los grupos valencianistas y los partidos políticos de nuevo cuño. Si son más, por muchos buñuelos, tendremos chocolate para todos. Corramos en masa a dar nuestro apoyo a estas entidades valencianistas, genuinamente valencianas. Es una prueba sencilla que si no logramos superar hablará alto y claro de nuestra debilidad para levantar las defensas de Valencia. Y puedo asegurarles que no disponemos de mucho tiempo si queremos alcanzar ese noble, y justo objetivo. Estamos en tiempos de rumores, en época de guerras calientes que sacudirán los países uno tras otro para dar forma al nuevo mapa internacional. Los acontecimientos cruzarán veloces los cielos. Actuémos, no lloremos. No abrá piedad para nuestras lágrimas. 

Afiliate a este corazón